Beneficios para la salud que aporta la Dieta Atlántica

Si introduces las recomendaciones de la Dieta Atlántica en tu alimentación diaria conseguirás no sólo comer sano y rico, sino que todo tu organismo lo agradezca. Te detallamos algunos beneficios que puedes conseguir:

LOS OMEGAS DEL CORAZÓN.  La Dieta Atlántica es rica en ácidos grasos Omega 3 y Omega 6 que, fíjate bien, reducen el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares. Estos ácidos están en el pescado que comerás tres veces por semana; sobre todo en las variedades de pescados azules como las sardinas, el salmón, la caballa, el atún, el pez espada y el marisco, especialmente en cefalópodos, moluscos y crustáceos.
EL RIEGO SANGUÍNEO MEJORA. Gracias al ácido linoleico que se encuentra en el aceite de oliva. Desayunando tu tostadita con jamón y aceite de oliva favorecerás el riego sanguíneo a través de los vasos y las arterias.


REDUCES EL COLESTEROL.  Esto lo vas a conseguir gracias a los Fitosteroles que están en las nueces. Bloquean la absorción del colesterol propio y de la dieta, ayudando a reducir los niveles de colesterol LDL, el “malo”.

CORAZÓN JOVEN. Como vas a consumir con regularidad aceite de oliva, espárragos, lechuga, nueces, guisantes y frutos secos, tu organismo se enriquecerá con el aporte de vitamina E. ¿Qué consigues con ello? Pues que nuestras células se protejan contra el envejecimiento y la degeneración de músculos como el corazón.

CORAZONES FUERTES. El selenio, zinc y cobre que se encuentran en el pescado, los frutos secos, las berenjenas, legumbres, soja, apio y melocotones, protegerán nuestro corazón. Y, cómo no, con Firgas; un agua cardioprotectora que, debido a su relación calcio-magnesio y su bajo contenido en socio, contribuye a disminuir la tensión arterial y, por lo tanto, a proteger nuestro corazón.